mes de los mismas ventiscas cada día

terminó un invierno.
 Empieza otro tiempo. No hay mucho para algo nuevo.
No tengo casi sueños, soy un engranaje más en esta máquina que funciona con o sin nosotros. Hay gente que veo cada día, y ya sé acerca de su vida. Sus palabras, sus vidas privadas, domésticas y sé qué palabras y qué van a contar.
Saber de eso, ya me aburre.

Tambien, me veo al espejo cada día.